martes, 14 de abril de 2009

uno de losmuchos asesinos en serie

Gilles de Rais

Con apenas 20 años, Guilles de Laval, barón de Rais, era ya un joven de atractiva elegancia y sorprendente belleza. Había recibido una esmerada formación intelectual y militar que lo llevÓ a tomar lugar a lado de Juana de Arco como primer teniente a favor de su amigo el rey Carlos VII. Sirvió con tal distinción en las distintas batallas de la época, que fue recompensado con el título de Mariscal de Francia. La suerte le seguía sonriendo desde su venida al mundo en 1404.

Descendía de una de las familias más ricas y poderosas de Francia, y a los 11 años había heredado una de las mayores fortunas del país, que se había incrementado tras casarse a los 16, con su prima e inmensamente rica, Catalina de Thouars.

Por aquel entonces su vida transcurría con total normalidad, incluso acababa de ser padre de una niña y era uno de los nobles más ricos de Europa. No obstante su conducta cambiaría tras la captura de su protegida Juana de Arco. El joven Mariscal trató de salvarla con una obstinación casi obsesiva, pero de poco le iba a servir, pues Juana acabaría siendo quemada en la hoguera.

Tras el duro shock de haber perdido a la mujer que idolatraba en secreto, Guilles se separa de su esposa y se encerró en su castillo de Rais, negándose a tener contactos sexuales con ninguna mujer. Entonces comenzó una insólita carrera de crímenes y sacrilegios contra la Iglesia, pues trataba de desafiar a Dios por haber permitido que Juana fuese torturada y quemada.

Para divertirse, ordenaba que se organizasen en sus múltiples castillos lujosísimas fiestas y representaciones teatrales que eran conocidas en toda Europa, pero sus excesivos gastos pronto empezaron a menguar su fortuna y se vio obligado a vender varias de sus propiedades.

Preocupado por tales pérdidas, el barón de Rais se fue aficionando a la Alquimia e hizo que se instalase un laboratorio en un ala del castillo, donde trabajaba sin apenas dormir ayudado por alquimistas y magos importados de toda Europa a la búsqueda de la piedra filosofal, capaz, según la tradición esotérica, de transformar los metales en oro.

Al cabo de cierto tiempo, su sueño de oro no acababa de madurar, todo lo contrario, los Alquimistas y magos le costaban una fortuna que lo iba arruinando más y más, hasta que desengañado despidió a la gran mayoría. Los pocos que quedaron a su mando no tardaron en persuadirlo que solo con la ayuda del Diablo podría conseguir el oro que necesitaba.

(Algunas de sus numerosas biografías, cuentan que Guilles de Rais, llamado Barba Azul, habría hecho testamento legando parte de sus bienes a Satanás, pero reservándose su vida y su alma, según la leyenda. En las escrituras del castillo, figura como titular el mismo Diablo).

Los historiadores opinan que su primer crimen fue cometido con el propósito de realizar un pacto con éste para lograr sus favores. Pero tras haber cortado las muñecas a la víctima, haberle sacado el corazón, los ojos y la sangre, ni se apareció el Diablo ni logró transformar el metal en oro. Lo único que habría logrado, sería el haber descubierto su pasión secreta: la tortura, la violación y el asesinato de niños.

Este personaje sentía una predilección malsana por los niños y los adolescentes, hasta el punto de que se le atribuyó nada menos que la muerte de 200, tal vez más...

A partir del verano de 1438 comenzaron a desaparecer algunos muchachos de la misma ciudad de Nantes, de los pueblos de los alrededores, y la mayor parte, ocurrían cerca de la mansión del barón de Rais. También hacía entrar en su castillo a algunos de los niños mendigos que pedían limosna frente al puente levadizo, que eran retenidos contra su voluntad por sus servidores, violados y desmembrados posteriormente. La sangre y otros restos se conservaban para propósitos mágicos.

El mismo Guilles contó en alguna ocasión como disfrutaba visitando la sala donde los chicos eran a veces colgados de unos ganchos. Al escuchar las súplicas de alguno de ellos y ver sus contorsiones, Guilles fingía horror, le cortaba las cuerdas, le cogía tiernamente en sus brazos y les secaba las lágrimas reconfortándole. Luego, una vez se había ganado la confianza del muchacho, sacaba un cuchillo y le segaba la garganta, tras lo cual violaba el cadáver.

En una ocasión se acercó a un niño que había elegido previamente y lo llevó al gran lecho que ocupaba el fondo de la sala de "torturas". Después de algunas caricias, tomó una daga que colgaba de su cintura, y riendo a carcajadas cortó la vena del cuello del desdichado. Frente a la sangre que brotaba y al cuerpo que se convulsionaba el barón se puso como loco. Arrancó las vestimentas del moribundo, tomó su propio miembro y lo frotó en el vientre del niño, que dos de sus cómplices sostenían porque éste estaba sin conocimiento. Cuando por fin salió el esperma, tuvo un nuevo acceso de rabia, tomó una espada y de un golpe cortó la cabeza de la víctima. Guilles en pleno éxtasis se tumbó sobre el cuerpo decapitado, introdujo su miembro entre las piernas rígidas del cadáver, gritando y llorando hasta un nuevo orgasmo, se derrumbó sobre el cuerpo cubriéndolo de besos y lamiendo la sangre. Luego ordenó que quemasen el cuerpo y conservasen la cabeza hasta el día siguiente. En ese mismo suelo, desnudo y manchado de sangre se habría quedado dormido.

(Se dice que Guilles tras la comisión de los crímenes de vampirismo y necrofilia caía en un pesado sueño, casi en coma, hecho que se produce en otros asesinos vampiricos y necrofilios que también después de atacar a los cadáveres, como es el caso de Henri Blot).

A la mañana siguiente no quedaba huella del asesinato que se había cometido un día antes, pues los cómplices de Guilles limpiaron todo. Pidió que trajeran la cabeza y ante esta, se arrodillo bañado en lágrimas y prometió reformarse. Acerco sus labios a la cabeza, la beso largamente y se fue a su cama llevándola consigo y diciéndole que muy pronto se reuniría con otras cabezas tan bellas como ella...

Uno de los mayores placeres de Guilles era tener las cabezas decapitadas ante su vista. Luego llamaba a un artista de su séquito, el cual ondulaba exquisitamente el cabello del niño, le enrojecía los labios y las mejillas hasta darle un aspecto de belleza impresionante.

Cuando tenía bastantes cabezas cortadas, celebraba una especie de concursos de belleza, en el cual sus amigos e invitados votaban sobre cual era la más bella. La cabeza "ganadora" era dedicada a un uso necrofílico.

Tras las numerosas desapariciones de niños, poco a poco las sospechas se fueron tornando hacia la persona del barón, pero nadie se atrevía a acusarle, pues aunque más empobrecido seguía siendo un personaje muy poderoso, y sus víctimas en cambio, solo eran gente muy humilde. Por otro lado, los proveedores no cesaban de amenazar a los padres que reclamaban a sus hijos desaparecidos, y en todas partes se hacía el silencio.

A principios de 1440, llegaron los rumores hasta la corte del duque de Bretaña, quien ordenó abrir una investigación sobre los secuestros y la posible implicación del barón de Rais.

El 13 de septiembre fue detenido en el pueblo de Machecoul por un grupo de soldados, quienes hallaron en su propiedad los cuerpos despedazados de 50 adolescentes. El duque de Bretaña le hizo compadecer ante la justicia acusado de haber asesinado entre 140 y 200 niños en prácticas diabólicas.

Se le infligieron todo tipo de torturas para obligarle a confesar sus crímenes, que se obstinaba a negar pese a las evidencias, pero fue solo la amenaza de la excomunión lo que lo indujo a hacerlo detalladamente.

Gilles de Rais

En octubre, Guilles aceptó voluntariamente todos los cargos que se le imputaban y confesó que había disfrutado mucho con su vicio, a veces cortando el mismo la cabeza de un niño con una daga o un cuchillo, y otras golpeando a los jóvenes hasta la muerte con un palo y besando voluptuosamente los cuerpos muertos, deleitándose sobre aquellos que tenían las cabezas más bellas y los miembros más atractivos. Afirmó ante los magistrados que su mayor placer era sentarse en sus estómagos y ver como agonizaban lentamente, y que en los cargos que se le imputaban no había intervenido mas que él, ni había obrado bajo la influencia de otras personas, sino que siguió el dictado de su propia imaginación con el único fin de procurarse placer y deleites carnales.

Al amanecer del 26 de octubre fue llevado a un descampado junto dos de sus más destacados cómplices para ser ahorcado y quemado en la hoguera. En el patíbulo manifestó públicamente su arrepentimiento, instando a otros los presentes a no seguir su ejemplo y pidiendo humildemente perdón a los padres de las victimas. Murió aferrándose desesperadamente a su fe cristiana.

Accediendo a las súplicas de algunos de sus parientes, el cuerpo, parcialmente quemado, fue retirado de la hoguera y enterrado en una iglesia de las carmelitas en Nantes. Sus bienes fueron confiscados en beneficio del duque de Bretaña y de la Iglesia.

la condesa sangrienta

Retrato de Erzsebet Bathory

Más conocida como "La Condesa Sangrienta", debido a los macabros y sádicos crímenes que cometió, Erzsebet Bathory fue una aristócrata húngara perteneciente a una de las más ilustres familias de Europa. De hecho, de esta misma familia también fueron Esteban y Sigmund Bathory que ocuparon los tronos de Polonia y Transilvania, respectivamente, además de varios dignatarios de la Iglesia y ministros de Hungría.

Popularmente se cree que mataba a sus jóvenes doncellas para bañarse en su sangre porque creía que así se mantendría joven y bella. Se dice que llegó a asesinar a 650 personas para este propósito. Actualmente, y después de las investigaciones llevadas a cabo, no se sabe a ciencia cierta si esto es verdad o no, aunque sí se puede asegurar que cometió incontables crímenes de extrema crueldad.

La historia de Erzsebet comienza en 1560, fecha en la que vino al mundo en el seno de una de las más importantes familias de Hungría. Se le dio una educación esmerada, llamativa para la mujer de esa época y de esa región del mundo, que en ese momento era conocida como Reino de Hungría. Mientras que la mayoría de los nobles de esa zona y en esos años apenas podían escribir, ella dominaba con fluidez el latín, el alemán y el húngaro.

Erzsebet creció como una chica aplicada, aunque ya en su temprana infancia comenzó a llamar la atención por sus comentarios sobre la vejez y la muerte.

Argumentaba que ella no había nacido para morir, y que todo lo bello que le pasaba no podía desaparecer así porque sí. Tal vez en ese pensamiento se encuentre una de las claves que la llevaron a convertirse en la asesina más sanguinaria de la historia.

A la edad en que la mayoría de las muchachas descubren el amor y la belleza en el sexo opuesto, ella manifestó atracción por otras chicas y, especialmente, por su sangre.

En sus 15 años, Erzsebet fue casada obligatoriamente (como se acostumbra entre los nobles de esa época) con otro hijo de familia aristocrática húngara llamado Ferencz Nadasdy.

Ferencz era un hombre acostumbrado a domar caballos salvajes y lidiar con situaciones de peligro, pero nunca consiguió que Erzsebet demostrara sumisión frente a sus deseos. Por el contrario, siempre encontró en ella el espíritu de un potro indomable.

La condesa pasaba varias horas frente al espejo; ensimismada, narcisa y con poco interés en su vida matrimonial.

La habitación de Erzsebet era fría e impersonal, y en ese ambiente de pocos afectos la salud de Ferencz empezó a debilitarse. A medida que el marido perdía fuerzas y ganaba achaques, la condesa se volvía cada vez más ermitaña. Aunque no dejaba de buscar placer en amantes jovenes.

El matrimonio Bathory-Nadasdy vivía en el sombrío castillo de Csejthe, situado en el llamado Reino de Hungría.

Ferencz era conocido como el "El Caballero Negro", por sus destacadas proezas como general en el campo de batalla. Era tan cruel como su mujer. Estuvo la mayor parte de su matrimonio luchando contra los turcos y cuando volvía a casa disfrutaba torturando a los prisioneros.

El hecho de que Ferencz estuviera ausente gran parte del tiempo fue la causa de que Erzsebet buscara refugio en numerosos amantes de ambos sexos de los que pronto se aburrió, de forma que, intentando buscar nuevos divertimentos, llamó a gran cantidad de brujos y alquimistas que la iniciaron en ciertas prácticas de brujería en las que se centró su vida a partir de entonces.

Su marido la abandonó definitivamente en 1604: murió a mediados de ese año. El fallecimiento de Ferencz incrementó su locura por no envejecer. Las sirvientas ya padecían las consecuencias de aquellos deseos. Tenían órdenes de preparar brebajes y pócimas para contrarrestar los efectos del paso del tiempo. Con la muerte de su marido, esas órdenes también dejaron de tener efecto. De esa manera la Condesa desató y empezó su escalada criminal.

Una de las mejores amigas (y cómplices) de Erzsebet se llamaba Darvulia, una anciana conocida en los alrededores como "La Bruja del Bosque".

Paloma Picasso intrepretando la vida de Erzsébet Báthory

Luego de la muerte de su esposo, Darvulia abandonó la casa donde vivía y se mudó al castillo de Csejthe. Erzsebet estaba fascinada por la hechicera, creía en todos sus poderes y necesitaba de sus hechizos para mantener la ilusión de frenar el envejecimiento. Los brebajes de Darvulia pretendían disimular el paso del tiempo. Así, la magia negra, los conjuros, alquimia y todo de lo que era capaz Darvulia se instalaron en la habitación y en la vida de la condesa.

A partir de la aparición de la hechicera se meciona a la Virgen de Hierro, una muñeca de tamaño natural que Erzsebet utilizaba en sus ritos de sangre.
Convencida de que la única forma para anular el envejecimiento era bañarse o beber sangre de doncellas jóvenes, desparramó toda la maldad de la que ella era capaz en pos de obtenerla y disfrutarla.

Manipulada por su dueña, la Virgen de Hierro era un objeto de tortura. Era de metal, con cabellera rubia, joyas, maquillaje y siempre se presentaba desnuda.
Con falsa y perversa amabilidad, la autómata recibía y luego abrazaba a las jóvenes víctimas de la condesa. Cuando las tenía entre sus brazos, sus falsos senos se abrían y apuñalaban a la presa. Estando las víctimas malheridas, eran degolladas y su sangre era bebida por Erzsebet. Y, si la cantidad era suficiente, hacía llenar una gran bañera con la sangre de las doncellas y se sumergía en ella, buscando desesperadamente la fuente de la juventud.

En los asesinatos, Erzsebet no actuó sola. Sus cómplices fueron dos de sus criadas:
Jo Ilona y Dorko, ambas fieles e igual de sanguinarias que las Condesa. Se encargaban de buscar a muchachas de entre 12 y 18 años, traerlas al castillo y mantenerlas siempre listas para los sometimientos de su ama. Erzsebet las necesitaba a todo momento; cuando padecía dolores de cabeza, por ejemplo, bajaba hasta el sótano para darles mordiscos y masticar la carne arrancada.
Los gestos de dolor de las doncellas, y las gotas de sangre calmaban, enseguida, cualquier molestia.
El origen de la historia que dice que utilizaba sangre para fines cosméticos data de que un día, propinó una violenta bofetada a la criada que la estaba peinando, con tan mala fortuna que ésta comenzó a sangrar y su sangre salpicó la mano de la Condesa. Convencida de que el trozo de piel donde había caído la sangre se veía más lozano, proyectó tomar baños de sangre humana para mantener su juventud y belleza eternamente.

Erzsebet no solo bebía la sangre de infortunadas muchachas, también las envolvía en orgías indescriptibles. Padecían los peores tormentos. Si hablaban mucho, ella misma les cosía la boca.
Para la gente del pueblo, las chicas que iban al castillo lo hacían en calidad de empleadas. Pero, a medida que iban desapareciendo, empezaron a circular rumores que, de todos modos, no eran ni por asomo más crueles que la verdad sobre las atrocidades que se llevaban a cabo en el castillo de Csejthe. Sólo decían que la condesa Bathory las mataba para bañarse en sangre de vírgenes. Por eso, incluso antes de ser acusada oficialmente, la empezaron a llamar "La Condesa Sangrienta". Erzsebet y sus cómplices daban explicaciones muy tontas para justificar la desaparición de las doncellas. Argumentaban que habían tropezado, que una rara enfermedad las había matado sorpresivamente, que un animal las había devorado en el bosque, etc.

Ruinas del Castillo de Csejthe

Más tarde que temprano, acusaron a la Condesa. No por simple acto de justicia, sino porque, no conforme con las campesinas, empezó a reclutar a las hijas de personas adineradas de la zona.
Fue el colmo para la sociedad de esa época; así, su abominable imperio empezó a sentir los primeros tambaleos.
Erzsebet fue llevada a tribunales en donde 20 jueces varones la interrogaron por sus crímenes. Fue condenada, pero no a morir, sino a padecer un encierro perpetuo en su propio castillo.

Representación del juicio

Por órdenes judiciales tapiaron ventanas y puertas del castillo, especialmente las de su aposento: solo se mantuvo un pequeño orificio por el cual se le suministraría escaso alimento y agua.

Así vivió durante casi 3 años. El 21 de Agosto de 1614 murió sin mostrar muestras de arrepentimiento. Tenía 54 años, y las arrugas que tanto odiaba la recubrían por completo. Su rostro, que siempre había mostrado una fría serenidad, estaba terso, sí, pero no por haber encontrado la fuente de la juventud, sino por el frío insoportable que padeció confinada entre las paredes de su habitación. Según el conteo oficial de víctimas, las doncellas que murieron de peor forma fueron 610, aunque se estima que el número total de mujeres asesinadas por Erzsebet alcanzó los 650.

Gran parte de los investigadores achacan los malvados instintos de Erzsebet a la degeneración genética a la que habían llegado los miembros de esta familia debido a la endogamia, pues la única manera de mantener las posesiones era el matrimonio entre familias nobles húngaras.

El auténtico Drácula, Vlad Tepes

Los documentos existentes demuestran la unión entre la familia Bathory y la de Vlad Tepes, "Drácula". De hecho, un miembro de la familia Bathory, Stephen Bathory, fue quien dirigió la misión que devolvió a Drácula al trono en 1476.
Además, los antepasados húngaros de Drácula estaban relacionados con el clan Bathory.

Su descendiente actual no la quiere
“Pienso más en ella como el personaje de una de mis óperas que como un antepasado. No siento prácticamente nada hacia ella. Murió hace 400 años y no han sobrevivido recuerdos ni posesiones suyas. Sólo nos ha quedado su retrato –una copia de una imagen del Renacimiento– y sus diarios, que pertenecen al archivo estatal de Budapest. Cuando era pequeño, resultaba emocionante saber que tuve una antepasada vampiresa, pero por supuesto, hoy estoy en completo desacuerdo con su existencia. He crecido sin las divisiones éticas y raciales de su época. Ella fue educada de otra forma, en otro tiempo, y fue una mujer enferma con mucho poder. La gente con poder da miedo incluso hoy (hay muchas personas de ese tipo en Estados Unidos). Era muy inteligente y poderosa, y cuando pienso en su conducta entiendo que tenía una grave afección mental, quizá una combinación de esquizofrenia, deficiencia alimentaria y educación basada en el poder, según la cual podía tratar a los demás como se le antojara. Tal vez era tan inteligente que se convirtió en una mujer ebria de poder que estaba por encima de los demás y eso acabó por ser una adicción que satisfacía lo que no podía conseguir con política o dinero. Sin embargo, mucha gente visita la “web” y la venera. Buscan sus fotos, hacen preguntas... Creo que están buscando un modelo de poder que no tienen en sus vidas. 400 años después de su muerte, ella sigue viva gracias a la imaginación de estas personas. Yo no creo en vampiros, pero hay seres humanos con mucha maldad que pueden haberla heredado a través del ADN, la educación... En ese sentido no me considero una persona muy espiritual”.

vampiros reales segunda parte

Vampiros reales II

JOHN GEORGE HAID (1909-1949)

Nacio el 24 de julio de 1909 en Stamford, Linconshire, Inglaterra. No se tienen antecedentes de desordenes mentales en su familia. Haigh afirmó que su niñez fue callada y monástica, sin las típicas alegrías de niño. Sus padres pertenecían a una secta religiosa llamada "La Gente Peculiar" o "La Hermandad de Plymouth"; eran puristas y anticlericales. Le leían historias de la Biblia y le estaba prohibido participar en deportes o cualquier forma de entretenimiento. Eso estaba bien para él, pues aborrecía ensuciarse. Rara vez se comportaba mal, pero cuando lo hacía, su madre le pegaba en las manos con las cerdas de un cepillo. Después Haigh diría que este castigo le hacía sangrar , y lamía la sangre, de ahí su apetito por esta. De esa inmersión religiosa, Haigh describio como solía meditar con la imagen de Cristo sangrante de retratos en la Catedral, y eso lo había afectado y en parte inspirado su apetito por la sangre.

Estuvo en prisión varias veces por robos y fraudes. En 1944 estuvo involucrado en un accidente automovilístico. Sufrío una herida en la cabeza, que sangró hasta su boca. Afirmó que esto revivio en el sueños de sangre de su ñiñez.

Fue en ese mismo año que empezó a asesinar. Respecto a su primera víctima de apellido Mc Swan, Haigh afirmó que de repente tuvo la necesidad de beber sangre, así que golpeó a Mc Swan en la cabeza con un tubo o madero. Luego le cortó la garganta.
"Tomé una taza y puse sangre de su cuello en la taza, y la bebí"

Dejó al cadáver toda la noche. Fue esa noche cuando Haigh soñó con un bosque de sangre:
"Vi ante mi un bosque de crucifijos...que gradualmente se transformaban en árboles. Al principio creí que había rocío, o lluvia, goteando de las ramas, pero al acercarme, me di cuenta que era sangre. De pronto el bosque entero comenzó a retorcerse y los árboles, tiesos y erectos, escurrían sangre...Un hombre fue a cada árbol y recogio la sangre." Ese hombre invitó a Haigh a "beber" también.

Encontró un tambor de 40 galones y puso a Mc Swan adentro, después vertio ácido sobre él.

Dos meses después según dijo, asesinó a una mujer madura de Hammersmith, quien nunca fue identificada. Después decidió asesinar al resto de los Mc Swan. Les golpeo con un tubo y afirmó haber bebido de su sangre, y los disolvio en baños de ácido. Después con engaños se hizo de sus posesiones. También afirmó haber matado a un joven llamado Max de Kensington, pero no hubo forma de probarlo.

Dos años después de gastarse el dinero adquirido de los Mc Swan esté se le había acabado, así que buscó otras víctimas, los Henderson. El Dr. Archibald Henderson de 52 años y su esposa Rose de 41. Pretendiendo comprar su casa, entabló una amistad con ellos y esperó pacientemente casi 5 meses. En febrero de 1948, Haigh visitó a los Henderson y paso varios días con ellos. Afirmó que entonces empezó un "ciclo de sueño", indicando los sueños sangrientos que lo hacian asesinar. Al mismo tiempo se le acababa el dinero. En febrero 12, le disparó con su revolver al Sr. Henderson en la cabeza y después también le disparó a la Sra. Henderson, ató los cuerpos y los dejó toda la noche. De cada uno de ellos tomé mi trago de sangre",

En su diario se encontró esa fecha indicando las iniciales de los Henderson junto a dos cruces rojas. Los disolvió en ácido, excepto por un pie que Haigh no se molestó en disponer de el. Aunque Haigh afirmó haber asesinado a los Henderson para conseguir su sangre, sus actos subsecuentes para apropiarse de sus posesiones y el estado de sus finanzas indicaban otra cosa.

Después, según el, asesinó a una chica llamada Mary de Eastbourne. Lo cual no fue probado, y no es seguro que siquiera haya existido.

Nuevamente gastó el dinero obtenido y perdió parte en el juego, así que su siguiente víctima fue Mrs. Durand-Deacon, a quien engañó con un proyecto para inversión y al estar esta examinando algún papel le disparó por detrás en la cabeza. Después, según afirmó Haigh fue a su auto, buscó un cortaplumas y un vaso, y usó estos artículos para extraer sangre de ella para beberla. Puso el cuerpo en un tambor de 45 galones con ácido y dejó que este hiciera efecto.

De niño Haigh, había hecho un escrito profético describiendo su naturaleza irremediable:
"Debemos aceptar que una falta, aunque encuentre una gracia perfecta y total restauración, no cura una disposición natural".

Haigh afirmó haber matado a nueve personas, pero nunca se descubrio nada de tres de ellas. Es posible que haya dicho lo de esas tres víctimas para probar que no se había beneficiado economicamente de ellas y apoyar su historia de que asesinaba por la sangre. Haigh tenía la idea de que no podía probarse un asesinato sin el cuerpo. El entendía el témino corpus delicti sólo como el cadáver de la víctima, sin el cual según el, no podía haber incriminación. Así que pensó en la forma de disponer de los cuerpos. En prisión experimentó con ácido sulfúrico en ratones, descubriendo la relativa facilidad de deshacerse de un cuerpo. Sin embargo no había tomado en cuenta el peso de ciertas evidencias, que aún sin un cuerpo, podían probar la probable culpabilidad. Además de su confesión dada, alardeando de su segura inculpabilidad, se usaron como evidencias objetos personales de las víctimas,la dentadura de Mrs. Durand-Deacon, etc.

El primero de abril de 1949 se presentaron los cargos contra Haigh. Haigh pensó que después de unos años en una institución mental sería liberado y continuaría sus asesinatos. Había visto los exagerados periódicos que lo describían como un vampiro loco por la sangre y el estaba feliz de ello. Además estando en su celda bebio su orina.

Respecto a su evaluación psiquiátrica, doce médicos examinaron a Haigh antes y después de su juicio, interesados en su compulsión por matar por sangre. Cas siempre dicha compulsión es parte de una desviación sexual y es incidental a la compulsión sexual en sí. Haigh no indicaba tal perversión. De hecho parecía tener poco interés en el sexo. Haigh pasó por varios exámenes, incluyendo un electroencefalograma. Los resultados fueron normales. En la opinión de muchos doctores, Haigh estaba sano y sólo fingía su demencía. El Dr. Henry Yellowlees afirmó sin embargo que Haigh tenía una "constitución paranoide". De acuerdo con las descripciones de los años 40 tal condición resultaba parcialmente hereditaria y parcialmente del ambiente, en especial en el del crecimiento. Era una etapa preeliminar en las "insanidades paranoides". Al ser Haigh criado en una religión fanática y paranoide y criado por una madre que creía demasiado en los sueños como instrumentos de adivinación, al infundírsele temor a la furia divina en cada falta, y al no permitírsele tener amigos, se había creado el "El estudiante solitario" que era "el paranoico potencial". Además sus sueños con Cristo sangrante denotaban que siempre fue la cuestión de la sangre lo que le preocupaba. Yellowlees uso como referencia un libro escrito por el Profesor Tanzi sobre desórdenes mentales. En él se consideraban varios tipos de paranoia y Haigh tenía la mas rara y terrible, la "paranoia egocéntrica", a veces referida como paranoia "ambiciosa" o "mística". La fantasia del paciente se vuelve su "hogar" psicológico. Se ve a si mismo como omnipotente. Esta en contacto con alguna fuerza exterior que lo guía. Yellolees mencionó que Haigh le había dicho que había sido guiado por una interpretación de un verso del Antiguo Testamento a beber su propia orina. Los paranoicos se muestran indiferentes al sexo, porque su instinto esta sublimado hacia una autoadoración. El creía que al matar a esas personas cumplía un destino. Sabía que esos crímenes eran castigados por la ley, pero se creía superior a la ley. Aunque no creyó que Haigh inventara lo de los sueños de sangre, si creyó que exageraba sus efectos en él mismo. Asimismo creyó que aunque Haigh hubiese probado la sangre, era dudoso que la hubiese bebido como afirmó haberlo hecho. Yellowlees creyó que era bastante lúcido e inteligente como para saber lo que hacía. Sin embargo Haigh había entablado amistad con un empleado en el hospital psiquiátrico de Sussex y había adquirido información de las enfermedades mentales, de patrones de comportamiento, caracterisicas y hábitos de diferentes desórdenes. En su vida se había hecho pasar por abogado, ingeniero, doctor, etc., así que bien podía haber intentado hacerse pasar por una persona que sufría un desorden mental.

Haigh ejerció su vampirismo en una época en que la ciencia barría las supersticiones y ofrecía explicaciones mas o menos razonables para el comportamiento humano. Donde antiguamente hubiera cabido la excomunión de la Iglesia, una maldición o el anuncio de un castigo divino, ahora se anotaba el informe de un psiquiatra que examinaba los actos del vampiro a la luz de las teorías de Sigmund Freud.

Los abogados defensores de Haigh llamaron al doctor Henry Yellowlees, psiquiatra, para que procurara situar al vampiro como demente y no como asesino. El doctor presento un análisis de los sueños de Haigh y dijo que eran "catalizadores de sus crímenes". Quedo manifiesto que, según una de las enseñanzas freudianas básicas, existe una implicación sexual en los crímenes violentos (particularmente en el asalto brutal o el asesinato).

Para los científicos, la psicología de Haigh era la de un adolescente que se masturba y asocia de inmediato el semen con la sangre. Haigh (decían) era capaz de experimentar la misma exaltación derramando uno y otro liquido.

El juicio comenzó el 18 de julio de 1949, alrededor de 4,000 personas asistieron. Haigh se declaró no culpable. La defensa fracasó en intentar probar que no era responsable de sus actos. Durante el juicio Haigh jugó con un crucigrama. Haigh fue hallado culpable, al preguntarle el Juez si tenía algo que decir, Haigh ladeó la cabeza y dijo-"Nada en absoluto"-. El Juez lo condenó a muerte. Haigh escribió su biografía para el periódico que pagó por su defensa, escribió cartas a sus padres y a su prometida. Tenía la esperanza de reunirse con ellos en el Cielo. Haigh mencionó que creía en la reencarnación y dado que su misión no estaba aún terminada, regresaría. Insistió en que no tenía miedo a ser ahorcado.

Madame Tussaud le solicitó hacerle un molde de su máscara mortuoria para su Museo de Cera, a lo cual Haigh estuvo más que complacido en aceptar e incluso heredó sus ropas a la "Cámara de los Horrores de Madame Tussaud", dando instrucciones de que se mantuviera su figura en perfectas condiciones; los pantalones planchados, el cabello partido, los puños de la camisa salidos.

El 6 de agosto de 1949 fue ejecutado en la Prisión de Wandsworth.



Gilles de Rais

Nacido en 1404 en el castillo de Machecoul, hijo de una de las familias más adineradas de Francia, recibió desde muy joven una amplia instrucción militar e intelectual, lo que le haría un joven atlético y extremadamente inteligente. A la edad de 10 años el padre de Guilles, Guy de Rais, apellido que adquiriera al casarse con su sobrina para acceder a la fortuna de la familia Rais; Murió durante una cacería de jabalíes por lo que Guilles heredó su vasta fortuna. Durante gran parte de su adolescencia estuvo bajo la instrucción de su abuelo materno que carecía de escrúpulos y era muy ambicioso, sus intrigas acrecentaron la fortuna de Guilles; este también lo forzó a casarse con su prima cuando sólo tenía 16 años para adquirir más riquezas, este matrimonio celebrado en 1420 sucitó cierta polémica por la relación de parentezco que tenían y por no haber pedido permiso para su realización al Pontífice en funciones.

A la edad de 24 años, Guilles de Rais peleó valientemente en la guerra contra los ingléses al lado de la célebre Juana de Arco por quien profesaba una profunda y secreta admiración a la que consideraba una especie de protegida. Sus éxitos militares le valieron el título de Marqués y el reconocimiento como héroe nacional, Sin embargo, la ejecución y quema de Juana de Arco causaría particulares reacciones en el jóven marqués. Rais consideró la muerte de Juana como una injusticia y consideró esta una traición de dios hacia una fiel servidora suya, en venganza, el marqués se dedicaría a intentar insultar a su dios en todas las formas posibles para desquitar la muerte de su protegida.

Guilles abandonó a su esposa y única hija y se retiró a sus varias propiedades donde daría carta abierta a la celebración de cuanto festejo absurdo y desmedido fuera posible permitiéndo el desenfreno de los asistentes, esto comenzó a menguar su fortuna pues los gastos y extravagancias que Guilles costeaba para sus residencias y las fiestas que en ellos se realizaban requerían sumas considerables aunado a ello la continuidad de dichos eventos. Para tratar de obtener más riquezas Guilles recurrió a la ayuda de alquimistas que pudieran enseñarle a materializarlo de la nada a través de la piedra filosofal, por supuesto, todos ellos eran charlatanes que sólo buscaban formas de explotar al desesperado Marqués, uno de ellos y el que más impacto causaría en la vida del Marqués, sería Francesco Prelati quien lo inició en la magia negra y le indicó que para poder recuperar la fortuna despilfarrada debía sustentar un contrato con el mismo diablo, evidentemente esta era otra charlatanería sin embargo hasta estos días sorprende su ingenuidad y credulidad, pues se había distinguido en su época por su gran inteligencia y conocimientos.

Decidido a suscribir un contrato con el diablo a fín de recuperar sus riquezas Guilles decidió poner una de sus más valiosas posesiones, el castillo Tiffauges a nombre del Diablo, asentando también que a su muerte heredaba todas sus posesiones al señor de los infiernos excluyendo su alma. Sin embargo el tan invocado demonio no se presentaba y Guilles decidió incurrir en cuantos aberrantes crímenes le fuera posible para poder ganarse la venía diabólica, de este modo hizo secuestrar a un hermoso niño de las familias pobres de Machecoul que sería cruelmente torturado y asesinado, a este niño le seguirían varios más.

Pese a todo el demonio no se aparecía al marqués que comenzaba a desarrollar un perverso placer sexual ante las torturas y sufrimientos de los niños y adolescentes maltratados gozando increíblemente al lacerarlos y mutilarlos. , Guilles de Rais también gustaba de otras practicas nefastas sobre los cuerpos sin vida de los infantes, así mismo desarrolló la tendencia a coleccionar las cabezas más bellas de sus víctimas, que hacía peinar y maquillar para posteriormente decorar su habitación con ellas; era muy común que el Marqués y su séquito de esbirros organizasen concursos para elegir a la cabeza más hermosa que se emplearía después para la necromancia.

En 1432, un aprendiz de doce años de edad desapareció para siempre de la aldea de Machecoul. Es preciso decir que Gilles de Sillé (primo del otro Gilles) había pedido permiso a los superiores del niño para enviarlo a un encargo. Otro niño de nueve años, quien se encargaba de los bueyes que pastaban en prados cercanos, también desapareció de la faz de la Tierra, luego de hablar con Sillé. Una viuda que habitaba frente al castillo se lamento de la desaparición de su hijo de ocho años, "un hermoso muchacho de piel blanca, y muy hábil". Dos semanas mas tarde se noto la ausencia de otro niño. Para calmar los alterados ánimos en la aldea de Machecoul, Gilles de Sillé explico a la gente que había raptado a los niños para enviarlos a Inglaterra como parte del rescate que se pedía para conseguir la libertad de su hermano, prisionero de los ingleses, los cuales exigían cierto numero de muchachos para adiestrarlos como pajes.

La verdad es que durante cinco años Gilles cometió crímenes horrendos con esos niños. Al final les esperaba el asesinato y la sodomía. Gilles de Rais también practico la alquimia y la magia, que utilizaba en los asesinatos de cientos de niños. Secuestraba, violaba y despedazaba lo mismo a muchachos que a muchachas; pero sus preferencias sexuales eran con los jóvenes. Después de llevarlos a su castillo, el y sus amigos abusaban de ellos, tras lo cual los mataban y bebían su sangre de la manera más horrible.

Cuando había participado en una de aquellas orgías, Guilles quedaba sumido en una especie de "coma", de la que emergía con renovadas ansias y ferocidad.

Las continuas desapariciones de los niños cerca de las propiedades de Rais eran motivo de especulaciones, si bien nadie se atrevía a acusar directa y abiertamente a Rais ya que aunque empobrecido seguía siendo un personaje poderoso y realmente de temer. Sin embargo los crímenes de Rais no quedarían impunes, el duque de Bretaña hizo investigar las desapariciones de estos niños llegando al resultado de la culpabilidad de Rais en la perpetración de los crímenes, fue apresado en su castillo de Machecoul en septiembre de 1440. El duque lo hizo comparecer acusado del asesinato de por lo menos 140 niños y adolescentes, pero Rais se negó a declararse culpable razón por la que fue sometido a las más diversas torturas.

No fue sino hasta que se le amenazó con excomulgarle que Rais decidió confesar allegándose total culpabilidad en los crímenes detallandolos y revelando una cifra de casi 200 niños y adolescentes muertos para satisfacer sus depravaciones, negando que nadie más hubiera participado de ellas, si bien era evidente que trataba de proteger a los que le sirvieron y colaboraron en sus crímenes. Guilles de Rais y dos de sus más activos ayudantes fueron sentenciados a muerte, antes de ser colgado Rais se disculpó públicamente ante el pueblo por sus acciones, además de recomendar que nadie siguiese su ejemplo ni se sumiese en la perversión en que se sumió él, aferrado a su devoción católica fue colgado y quemado en la hoguera; por petición de los familiares el cuerpo parcialmente quemado fue retirado del fuego para enterrarsele.

vampiros reales primera parte

Vampiros reales I

Arnold Paole

A pesar de ser este uno de los casos de vampirismo mejor documentados del siglo XVIII, no existe testimonio escrito de lo que las supuestas victimas del ataque vampírico vieron al ser atacadas. Además aunque sea cierto todo lo que se cuenta en los informes escritos por el grupo que desenterró el cadáver de Arnold Paole existen hipótesis medicas que rebaten todas las supuestas características propias de un vampiro en su cadáver, como el crecimiento de uñas, o la sangre brotando de los orificios.

Arnold Paole fue un soldado Serbio que vivió a principios del siglo XVIII. Paole sostenía que mientras estuvo destinado en Gosswa, fue atacado por un vampiro. La gente de esa zona creía que la única manera de librarse de la influencia Vampírica era comer algo de tierra de su tumba y rociarse de la sangre del vampiro. Paole sostenía haber practicado el rito.

Aparentemente el método debió funcionar y Paole pudo regresar a su hogar en 1727; Sin embargo murió al poco tiempo de una caída desde gran altura, y fue enterrado. Al poco tiempo de morir Paole empezaron a circular rumores de ataques nocturnos y en poco tiempo 4 personas del pueblo murieron repentinamente.

La gente del pueblo empezó a tener miedo del posible caso de vampirismo y decidieron desenterrar el cuerpo de Paole. Formaron un grupo de dos oficiales militares, dos cirujanos del ejército, y un sacerdote de la iglesia local para investigar en la tumba de Paole. Cuando el grupo exhumo el cuerpo, encontraron el cadáver fresco. No había descomposición del cuerpo de ningún tipo, y de hecho la vieja piel y uñas se había caído, y habían crecido nuevos para en su lugar. Además la sangre fresca fluía de sus orificios corporales. Cuando un miembro del grupo clavo una estaca en el cuerpo, gritó y la sangre fresca brotó de la herida. El grupo entonces arrojó ajo alrededor del restos de Paole, e hizo igual a cada uno de los sepulcros de las víctimas de Paole.

Algunos años después, otra epidemia surgió repentinamente y se procedió a hacer una nueva investigación en el cementerio. En un informe de dicha investigación se mantiene que se exhumaron por lo menos 16 vampiros de sus tumbas. Todos los descendientes de Paole parecían tener las mismas características que el. Además estos nuevos vampiros llevaban enterrados aproximadamente el mismo tiempo que Paole cuando empezó a atacar. 4 de los vampiros eran niños, y tres estaban enterrados con sus madres.

La pregunta sobre si Arnold Paole era o no un verdadero vampiro queda todavía sin contestar. Pero bueno, casi 300 años después todavía no podemos afirmar ni negar nada.



Kuno Hoffman

En 1972 se confesó autor del crimen de una pareja de jóvenes. Fueron descubiertos ambos en el interior de un coche; habían sido asesinados con un revólver y estaban completamente exangües, toda su sangre había sido chupada, según confirmó el forense. Hoffman declaró, asimismo, haber sido el saqueador de varios cementerios en los que abrió los ataudes de mujeres recién enterradas. Al reconstruir su pasado se supo recibido de su padre cuando ñiño, se había quedado sordomudo.

En el juicio explicó:
"Maté a ese hombre y bebí su sangre porque quería ser tan guapo como él. Y mate a la chica porque era más guapa que las del cementerio."



Albert Fish
Albert Fish

Quien iba a imaginar que un hombre viejo, decrépito e inofensivo de mirada triste pasaría a convertirse en el caníbal del siglo.

Albert Fish nació el 19 de mayo de 1870 en Washigton en el seno de una familia respetada aunque con antecedentes en enfermedades mentales. Creció en un orfanato donde fue abusado sexualmente lo que le acarreó en su mente su fascinación por el sadomasoquismo. Se sabe que tuvo una caída desde un árbol lo que le provocó una lesión en el cerebro y como consecuencia dolores de cabeza crónicos y mareos.

En su niñez desarrolló una obsesión por el castigo, se divierte infligiendo dolor a los demás y a él mismo. Comienza su colección de recortes de prensa sobre asesinos en serie y especialmente de caníbales que es con quienes se siente identificado.

Con 20 años y con cierta experiencia en relaciones homosexuales masoquistas ejerce la prostitución en Washington donde viola a un niño y asesina a su primera víctima.

En esa época de su vida comienza a obsesionarse con la idea del pecado y alucina con la religión, su única salida es sacrificarse con dolor y él mismo se autocastiga frotando su cuerpo desnudo con rosas con espinas, clavándose agujas de marinero en la pelvis y en los órganos genitales… en una ocasión fue sorprendido en su habitación totalmente desnudo masturbándose con una mano y con la otra golpeándose la espalda con un palo con clavos y a cada golpe gritaba de dolor mientras su sangre corría por sus nalgas.

Sadomasoquista en todas su letras, se complacía insertándose agujas en su cuerpo, especialmente alrededor de su órganos genitales, con bolas de algodón que se introducía en su ano y les pegaba fuego. No solo consumía la carne de sus víctimas sino que además la orina, sangre y excrementos, lo que él atribuiría dicha tendencia a su triste historia de niñez abusiva.

Fish se hizo a sí mismo como pintor, recorrió Estados Unidos torturando a niños casi en cada estado. La mayoría de sus víctimas provenían de familias pobres (de raza negra) por lo que no era probable que le inculparan debido al racismo que por aquel entonces imperaba.

CARTA A LA FAMILIA DE GRACE BUDDS (niña que marchó con Albert Fish al falso cumpleaños de su sobrina).Clic aquí para leer esta carta

Fue detenido en ocho ocasiones: por tentativa de estafa, robo, pago con cheques sin fondo, cartas obscenas a anuncios de agencias matrimoniales.

Fue internado en tres ocasiones en un hospital psiquiátrico aunque duró poco pues consideraban que no era peligroso ni estaba loco pues lo que él padecía era una personalidad psicopática de carácter sexual. La policía tardaría 6 años en acusarle de asesinato.

Al fin fue detenido el 13 de diciembre de 1928.

Su confesión

En su declaración afirmó que tras matar a la niña le cortó la cabeza y partió su cuerpo en dos con una sierra a la altura del ombligo y además añade:

"...Decidí comérmela. La llevé a una casa abandonada en Westchester en la que me había fijado. En el primer piso me desvestí completamente para evitar manchas de sangre. Cuando me vio desnudo se echó a llorar y quiso huir, pero la alcancé. La desnudé, se defendió mucho, me mordió y me hizo algunos rasguños. La estrangulé antes de cortarla en pedacitos para llevarme a casa toda su carne, cocinarla y comérmela. No pueden imaginar cuán tierno y sabroso estaba su culito asado. Tardé nueve días en comérmela por completo. No me la tiré, aunque hubiese podido hacerlo de haberlo querido, murió virgen".

Confiesa además otros asesinatos cometidos así como “un deseo irresistible de comer carne cruda las noches de luna llena” y comer sus propios excrementos ( por dios!!). Sin miedo… le fascinaba bailar desnudo durante las noches de luna llena.

Declaró que a un niño de tan solo 4 años le flageló hasta que su sangre corrió por sus piernas, le cortó las orejas, nariz y ojos, le destripó y cogió su sangre para bebérsela, lo desmembró y se preparó un estofado con la parte más tierna.

Eso no es todo amigos, a un joven vagabundo lo secuestró durante dos semanas, le obligó a hacer toda clase de actos coprófagos, masoquistas y sádicos, intentó cortarle el pene con unas tijeras ( buaah) pero tal era su sufrimiento que arrepentido le dio 10 dólares y le dejó marchar.

Cuando se le preguntaba la cifra exacta de sus víctimas respondía sonriendo: “por lo menos 100” ( lo que sí es seguro un total de 15 inofensivos niños).

Una radiografía mostró un total de 29 agujas en sus testículos (unas cuantas oxidadas)

“Yo no soy un demente, solo un excéntrico. A veces ni yo mismo me comprendo”.

“Qué alegría morir en la silla eléctrica. Será el último escalofrío, el único que todavía no he experimentado” (para él, placer supremo).
Sus últimas palabras antes de morir fueron: "¿Cómo es posible que yo haya llegado hasta aquí?". Es más, durante su ejecución, en la primera descarga se produjo un cortocircuito porque en su pubis tenía clavados más de 20 alfileres y clavos”. Fish por fin murió por cuasa de una descarga mucho más potente.

akasha

AKASHA, REINA DE LOS VAMPIROS

Akasha, reina del Kemet, el primer reino anterior al Egipto de las pirámides y los faraones, fue la primera en convertirse al reino de la noche, cuando Amel, un espíritu amante del sabor de la sangre humana se introdujo en su cuerpo, fusionándose con su corazón y transformando su cuerpo por completo, dándole la muerte para que la sangre ajena le diese la vida, transformando su carne en autentico mármol con el paso de los siglos, otorgándole fuerza para sobrevivir a los mortales, colmillos para beber la sangre de la yugular que Amel tanto desea, como moneda de cambio por la inmortalidad.

Se trata de un vampiro poderoso, los más cercano a Dios que haya pisado la tierra, pero cuya mente esta llena de sueños, de ideales imposibles cuyo único resultado son siempre miles de muertes.

Enkil, su rey y amante mortal, compañero de trono de Akasha durante seis mil años, que permanece a su lado por un amor profundo y ciego, que solo se levanta de su letargo para defender su permanencia al lado de su reina si alguien desea llevársela o beber de la fuente original.

Akasha, en su afan de traer la civilización a su reino introdujo la escritura y otras ciencias a Kemet. También se encargó de presionar a las tribus caníbales que poblaban en su reino, infligiendo un severo castigo a todo aquel que no abandonara las prácticas canibales. Esto la hizo muy odiada entre dichas tribus que no querían seguir su camino de civilización.

Los ejércitos de Akasha capturaron a Maharet y Mekare ( brujas devoradoras de carne humana), Akasha obligó a las gemelas a hacer una demostración de sus poderes espirituales y tras contemplar esa magia fascinante, celosa de su poder, obligó a Khayman a que las violase publicamente. Lo que enfureció a los espiritus.

Un asesino aprovechó el desconcierto y asestó puñaladas mortales a Akasha y a Enkil, momento que aprovechó Amel (uno de los espíritus enfurecidos) para introducirse en sus heridas y así poseer su cuerpo, dandole inmortalidad y una insaciable sed de sangre, convirtiendola asi en la primera vampiresa. Ella rápidamente salvó a Enkil, convirtiéndolo en vampiro también, dándole de beber su sangre.

Así comenzó el mito de Akasha y Enkil,los cuales de hecho son Osiris e Isis. Esto se debe a que los egipcios en sus mitos y leyendas crearon a Osiris, como Dios de la agricultura y la muerte, Osiris fue asesinado por su homólogo demoníaco Seth. Seth se encargó de establecer la balanza entre el bien y el mal. Sin embargo depués de ser asesinado la esposa de Osiris, Isis la poderosa diosa de la magia y del amor, extendió sus alas sobre el cuerpo ya muerto y le devolvió a la vida. La pareja representa la resurreción para los Egipcios que estaban obsesionados con la vida después de la muerte. Hasta el punto que idealizaron a Akasha y Enkil cuando descubrieron que Akasha devolvió a la vida a Enkil.

Comenzó un largo linaje de vampiros a lo largo del mundo, de acuerdo con las novelas de Anne Rice; los vampiros consideraban a Enkil y Akasha como sus dioses. Pasaron los siglos y la necesidad de sangre del Rey y la Reina de los vampiros disminuyó y se iban fortaleciendo cada vez más. Su piel se endurecio como el mármol y poco a poco su necesidad de moverse era menor. Se convirtieron en 'aquellos a los cuales había que proteger'.

Akasha y Enkil una vez transformados en estatuas vivientes empezaron a ser protegidos por los vampiros más antiguos que hacían de sus guardianes, los cuales les mantuvieron a salvo hasta el primer siglo antes de Cristo cuando sus protectores trataron de asesinarlos dejándolos al aire libre para que los rayos del Sol les abrasasen. Todos los jóvenes vampiros murieron a consecuencia de esto, pues cualquier daño que sufrieran Akasha y Enkil lo sufrirían todos los vampiros, los únicos que sobrevivieron fueron los vampiros más antiguos y aun asi sufrieron grandes quemaduras. Akasha y Enkil no sufrieron nigún tipo de daño al ser expuestos a la luz del Sol. De esto aprendieron que si los reyes sufrían daño alguno los principales perjudicados serían los vampiros, ya que les repercutiría directamente. Cuando Marius, uno de los vampiros más longevos y poderosos supo de su existencia, robó las estatuas y se convirtió en su protector por aproximadamente 2.000 años

el origen del vampirismo

Los orígenes de un mito

Desde la antigüedad las leyendas de vampiros han estado presentes en todas las civilizaciones, Mesopotamia, Sumeria. En el antiguo Egipto se temía a un misterioso pájaro “bebedor de sangre” que representaba la reencarnación de algún ajusticiado injustamente reencarnado en esa forma para atacar durante las noches a los hijos de sus asesinos.

La explicación que la ciencia ofrece sobre el origen de los vampiros se localiza en las enfermedades con pérdida de sangre, que los antiguos atribuían a seres diabólicos que atacaban durante la noche en busca del alimento esencial para su supervivencia.

En la cultura clásica encontramos conductas similares a las de los vampiros. Criaturas con la parte superior de mujer y la inferior en forma de serpiente que atacan a sus víctimas mordiéndolas.
En la Odisea de Homero aparecen sombras que se nutren de la sangre de los sacrificios realizados en rituales.

Las leyendas de los pueblos eslavos están plagadas de vampiros, empezaron a creer que eran cuerpos incorruptos que no habían muerto del todo; los no muertos. Creían que la causa se debía a mordeduras de determinados animales, como escorpiones, o personas que habían sido excomulgadas, que no se iban a la otra vida en paz y su alma era oscura. Su presencia se hacía notar cuando, durante las noches, el ganado desaparecía de forma brutal y misteriosa. Para atacarlos y terminar con ellos definitivamente utilizaban una cruz como defensa y una estaca que clavaban en el corazón, aunque también pueden morir definitivamente con un buen exorcismo, quemados, arrancándoles la cabeza o el corazón.

La leyenda de los vampiros había ido desapareciendo de Europa, cuando en el siglo XVII el abad Dom Agustín Calmet, un erudito en arqueología y teología, a la vez que en los temas bíblicos publicó un librito titulado Vampiros de Hungría y los alrededores. Como se cuidó de incluir testimonios médicos sobre el desenterramiento de infinidad de cadáveres incorruptos en los países que formaban la región de Transilvania, creyó estar ante unos evidentes y reales casos de vampiros.
En el siglo XVIII se produce un auge en la creencia de los vampiros i les asocian las muertes sin resolver i las desapariciones. Muchos cuentos infantiles de terror se llenan de personajes que llegan volando en mitad de la noche para atacar a sus víctimas indefensas. Algunas investigaciones relacionan las presuntas muertes por vampirismo con una epidemia de rabia (hecho que explicaría la violencia de los afectados i la poca tolerancia a los olores fuertes como el ajo).

Incluso la inquisición se ocupa de ellos, declarándolos criaturas demoníacas (de aquí la creencia que retrocedían delante de la cruz). Ciertos sectores de la iglesia, unido a unos editores avispados, convirtieron la obra de Calmet en una lectura obligada en Europa. Se diría que contaban con el remedio para frenar el avance espectacular que vivía el protestantismo. Y es que el vampirismo resurgió con una fuerza inusitada. Voltaire llegó a escribir: “…No se oye hablar más que de vampiros entre 1730 y 1735; se les descubre en todas partes, se les tiende emboscadas, se les arranca el corazón, se les quema…”. Pero el pensador francés llegó a más.
“Estos vampiros son cuerpos que salen de sus tumbas de noche para chupar la sangre de los vivos, en sus cuellos o estómagos, regresando después a sus cementerios”.


“…No se oye hablar más que de vampiros entre 1730 y 1735; se les descubre en todas partes, se les tiende emboscadas, se les arranca el corazón, se les quema…”.

Actualmente sabemos que ciertas capas arcillosas, lo mismo que otras clases de tierras, son capaces de mantener una temperatura cercana a los 0ºC, con lo que impiden que se corrompan los cadáveres…¿Cuántos muertos han sido considerados, al ser desenterrados, santos…o vampiros por el simple hecho de que sus cuerpos se mantuvieran intactos? Todo se basaba en que el cementerio se encontrara en uan región católica o en otra pagana.


Realidad Inquietante. La sangre se ha unido a la juventud, lo mismo que las enfermedades. Los médicos babilónicos eran considerados “sangradores”, debido a que recurrían a las sangrías para curar a sus pacientes, al creer que provocaban una regeneración del cuerpo al expulsar el mal.
La creencia de que la sangre daba la juventud daba pie a algunos de los crímenes más espantosos de la Humanidad cometidos por auténticos bebedores de sangre

lunes, 6 de abril de 2009

La Mejor Noche de mi Vida


La única escapatoria que tenia era correr, no podía detenerme ante la idea de la muerte, ¿y si lo hacia? que ganaba con seguir corriendo, enfurecerlo mas y solo darle a mi vida unos cuantos minutos?

La confusión me persigue, pero por instinto o por simple inercia sigo corriendo, viendo en mi mente las espantosas escenas de mis amigos y a la demás gente muerta en el suelo de aquel salón, ver a la gente que mas amaba yaciendo sin vida, las lagrimas inundan mis ojos, me lleno de miedo ante la idea de que estas me bloqueen la vista, solo paso la manga de mi suéter por mis ojos sin detenerme.

Y pensar que esa seria la mejor noche de mi vida, el día en que propondría matrimonio a la persona que mas amaba y compartiría con mis amigos una dicha inmensa, ahora solo corro para vivir o tal vez solo para alargar lo inevitable.

Tropiezo al intentar subir las escaleras del edifico escolar, solo puedo sentir el pánico que sube de mis pies a mi cabeza, cuando por el rabillo del ojo veo la imagen que destruyo por completo mi vida.

Todo queda en silencio, solo puedo sentir como mis ojos van perdiendo fuerza y mis brazos yacen sobre un gran río, un río color rojo escarlata que proviene de la mordida en mi cuello, una mordida profunda que hace que mi cuerpo quede sin vida, mis ojos se cierran cada vez más y el peso sobre mi espalda cada vez es mas grande. Mis dedos por alguna razón se mueven lentamente y sin fuerza intentando alcanzar algo, algo que no puedo ver debido a que la criatura poso su rostro frente al mió, puedo ver sus ojos inundados de ira... mis ojos se cierran completamente.